La importancia de difundir el conocimiento válido

Tal y como exponen Albornoz y Alfaraz (2006, pp. 7) “El conocimiento se ha convertido en el motor principal de cambio de las sociedades y las economías […]. La ciencia y la tecnología son reconocidas […] como factores decisivos para la transformación económica y social”; si se sigue este pensamiento, entonces se llega a la conclusión de que se requiere de una gran inversión e involucración en actividades de difusión del conocimiento por parte de los organismos competentes, y más aún, por parte de todos los actores de la sociedad que puedan y desean colaborar en dicha causa.

La difusión del conocimiento válido ha de realizarse teniendo en cuenta - entre otros aspectos - el público con el que se está intercambiando información: debemos adecuarnos al oyente, atender a sus intereses, y satisfacer sus curiosidades.

Corre o se enfría trabaja en pro a desarrollar estos aspectos: se pretende que las investigaciones, teorías y conocimientos lleguen a un número considerable de público; se pretende que dicha información se transfiera de manera coloquial, llana y natural – mientras se disfruta de una cena; se pretende que adquirir conocimientos no tenga que realizarse en un ambiente formalizado –; y sobre todo, se pretende “enganchar” al público, hacer que disfruten aprendiendo, y hacer que tengan interés por seguir haciéndolo.

La difusión del conocimiento en masas no es algo que encontremos en nuestro día a día; a gran escala se organizan conciertos (de música comercial y demandada por gran parte de la sociedad) o grandes eventos en las ciudades que ofrecen ocio y pasar un día diferente. La tendencia no es organizar una gran ponencia sobre ciencia en medio de la ciudad para 5000 personas; la población no se siente atraída para ello, por lo que, lo que se organiza en este sentido, tiene un público bastante delimitado – sobre todo a aspectos sociales y culturales de la persona –. Es por ello que, tal y como se ha expuesto, se realizará esta labor de manera atractiva para el pueblo.

No obstante, somos conscientes de que no es posible hacer una profunda difusión de todos los conocimientos existentes y disponibles, por lo que, también se ha considerado que, frente a esta "complicación", es necesario trabajar para que nuestro público sea crítico. Es de recibo sembrar en nuestro público la duda frente a todo aquello que se les presenta, e incentivar el sentimiento de interés por buscar informaciones alternativas.

"Cuando enseñes algo, enseña también a dudar de lo que enseñas"

Ortega y Gasset



Por Noelia Alejandra Hernández García